No basta con tener un inmueble fantástico para lograr venderlo o alquilarlo al precio que deseas y en el menor tiempo posible. En el mercado inmobiliario, hay muchos factores que pueden complicar el cierre del trato, pero hay estrategias que te ayudan a lograrlo y una de ellas es el llamado home staging.
El home staging es una técnica de decoración y marketing inmobiliario que tiene como objetivo hacer que un inmueble a la venta o alquiler se vea más atractivo para los posibles compradores o inquilinos.
Se trata de una estrategia que implica la preparación y presentación de una propiedad para que se vea más atractiva, moderna y acogedora, de manera que se pueda vender o alquilar más rápido y a un precio más elevado.
Desde entonces, el home staging ha ido evolucionando y se ha extendido a nivel mundial, convirtiéndose en una herramienta valiosa para propietarios, agentes inmobiliarios y profesionales del sector que desean mejorar la imagen de los inmuebles en un mercado muy competido.
Algunas de las ventajas del home staging:
- Aumenta la visibilidad y el interés de la propiedad. Al destacar sus puntos fuertes y hacer que se vea más atractiva y acogedora, llamará la atención de más posibles compradores o inquilinos.
- Puede aumentar el valor. Si un inmueble se presenta de manera más atractiva, aumenta su valor percibido lo que ayudará a que se venda o alquile a un precio más elevado.
- Ayuda a vender o rentar más rápido. Al presentar una propiedad de manera más atractiva, reduce el tiempo que tarda en venderse o alquilarse.
- Crea una imagen más profesional. El home staging ayuda a que los vendedores o propietarios del inmueble se vean más profesionales, lo que genera confianza y credibilidad en los posibles clientes.
El home staging en la práctica
El home staging se compone de técnicas y estrategias para resaltar los puntos fuertes de un inmueble, disimular sus debilidades y atraer a los posibles compradores o inquilinos. Algunas de estas técnicas son:
- Despersonalizar: Una de las técnicas más importantes en el home staging es despersonalizar el lugar. Esto implica retirar los elementos personales y decorativos que puedan distraer a los posibles clientes; la idea es crear un ambiente neutro que permita a los visitantes imaginar cómo se vería el lugar con su propio estilo.
- Despejar: Es importante que la propiedad esté ordenada y despejada para que los posibles compradores o inquilinos puedan apreciar los espacios y dimensiones del inmueble, especialmente aquellos lugares que pueden ser más atractivos como las habitaciones, la sala de estar o la cocina. Despejar incluye retirar el exceso de muebles y objetos que saturan el ambiente, así como objetos antiguos o que den una imagen anticuada.
- Iluminación: La iluminación es fundamental en el home staging, ya que un lugar bien iluminado resulta más atractivo. Se recomienda utilizar luz natural siempre que sea posible y complementar con lámparas y focos bien ubicados.
- Decoración: Un buen diseño marca la diferencia. Utiliza una decoración neutra y sencilla, que resalte los puntos fuertes de cada espacio. Es importante crear un ambiente acogedor y agradable mediante plantas, cojines, alfombras y objetos decorativos bien escogidos. Eso sí, evita decoraciones excesivas o muy coloridas que puedan distraer a los visitantes.
- Reparaciones: Cualquier reparación o mantenimiento que necesite la propiedad debe realizarse antes de mostrarla a los posibles compradores o inquilinos. Esto incluye desde arreglos de pintura hasta reparaciones en las tuberías o la instalación eléctrica.
- Exterior: El exterior es tan importante como el interior. Se recomienda mantener el jardín y la fachada en buen estado y realizar cualquier arreglo necesario. La idea es causar una buena primera impresión desde el momento en que los visitantes llegan.
El home staging ha demostrado ser una técnica muy efectiva para aumentar el valor percibido de un inmueble, acelerar su venta o alquiler y maximizar la rentabilidad de la inversión.
Si deseas aplicar esta estrategia, pero no estás seguro de cómo hacerlo, es recomendable contratar un home stager, el profesional especializado. También puedes recurrir a un diseñador de interiores o incluso algunos agentes inmobiliarios con experiencia en la materia pueden ofrecerte este tipo de servicios y brindarte consejos valiosos para preparar tu propiedad antes de salir al mercado.